lunes, 7 de julio de 2014

Capitulo 23 (Parte 2)

Capitulo 23

Parte 2


Peter

La sostengo contra mí durante tanto tiempo ni siquiera estoy seguro de si está despierta. Todavía tengo tanto que quiero decirle, pero no me quiero mover.
Amo la forma en que se siente cuando estamos envueltos juntos de esta forma. Temo que si me muevo, vendrá a sus sentidos de nuevo y me pedirá que me vaya.

Apenas han pasado tres semanas desde que Martina y yo terminamos. Cuando Lali preguntó si tomaría a Martina de regreso, no respondí, pero sólo porque sé que no creería mi respuesta.

Amo a Martina, pero sinceramente ya no creo que seamos lo mejor el uno para el otro. Sé exactamente dónde nos equivocamos. El principio de nuestra relación fue romántico hasta el punto en que era casi ficticio. Teníamos diecinueve años. 
Apenas nos conocíamos. La forma en que esperamos durante todo un año sólo construyó sentimientos que no se basaban en nada, excepto falsas esperanzas y el amor idealizado.

Para el momento en que Martina y yo finalmente pudimos estar juntos, creo que estábamos más enamorados con la idea de nosotros, en lugar de con el nosotros real. Por supuesto, la amaba. Todavía la amo. Pero hasta que conocí a Lali, no tenía ni idea de lo mucho que mi amor por Martina se construía a partir de mi deseo de lanzarme en picada y salvarla.

Martina tenía razón. No he hecho nada durante los últimos cinco años más que tratar de ser el héroe que la protege. ¿El problema? Las heroínas no necesitan protección.

Cuando Lali tocó el tema antes, quería decirle que no, que no tomaría a Martina de regreso. Cuando dijo que estaba aterrorizada de que deseara que fuera Martina, quería agarrarla y demostrarle cómo nunca he deseado, ni una vez, estar en ningún otro sitio cuando estoy con ella. Quería decirle que la única queja que tengo es no darme cuenta antes de para cuál de ellas era mejor. Con cuál chica tenía más sentido. Con qué chica aprendí a amar de una manera realista y natural, no en un sentido idealizado.

No dije nada porque estoy aterrorizado de que no lo entienda. He elegido a Martina sobre Lali una y otra vez, y es mi culpa haber puesto la duda en su mente. Y aunque sé que el escenario que está pintando nunca podría ocurrir, porque Martina y yo aceptamos que todo ha terminado, no estoy tan seguro de que no tomaría a Martina de vuelta. Sin embargo, esa decisión no sería porque quiero más estar con ella. Ni siquiera sería porque la amo más. Pero ¿cómo puedo posiblemente convencer a Lali de eso cuando es difícil para entenderlo?

 No quiero que Lali nunca se sienta como mi segunda opción, cuando sé en mi corazón que es la elección correcta. La única opción.

Mantengo mi brazo alrededor de ella, y recojo mi teléfono. Levanta la cabeza y apoya la barbilla en mi pecho, mirándome. Le devuelvo su teléfono, y lo toma, entonces se aparta de mí y presiona su oído contra mi corazón otra vez.

Yo: ¿Quieres saber por qué necesitaba que me escuches?

No responde con un texto. Sólo asiente, quedándose apretada contra mi pecho. Una de sus manos está trazando lentamente arriba y abajo desde mi cintura hasta mi brazo. La sensación de sus manos contra mi piel es algo que nunca quiero que sea un recuerdo. Bajo mi mano izquierda a la parte posterior de su cabeza y le acaricio el pelo.

Yo: Es algo así como una larga explicación. ¿Tienes un cuaderno en el que pueda escribir?

Asiente y se desliza fuera de mí. Mete la mano en su mesa de noche y saca un cuaderno y un bolígrafo. Me acomodo contra la cabecera. Me entrega el cuaderno, pero no se mueve más cerca de mí. Agarro su muñeca y separo mis piernas, entonces la muevo para que se acueste contra mí mientras escribo.

Se arrastra hacia mí y envuelve sus brazos alrededor de mi cintura, presionando su oreja a mi corazón otra vez. Pongo mis brazos a su alrededor y apoyo el cuaderno en mi rodilla, descansando la mejilla en la parte superior de su cabeza.

Desearía que hubiera una manera más fácil para comunicarnos, así todas las cosas que tengo que decirle podrían ser instantáneas. Me gustaría poder mirarla a los ojos y decirle exactamente lo que siento y lo que está en mi mente, pero no puedo, y odio eso para nosotros. En cambio, pongo mi corazón en el papel. Permanece todavía en mi pecho mientras me tomo casi quince minutos para organizar mis pensamientos y exponerlos todos frente ella.

Cuando he terminado, le entrego el cuaderno. Se reajusta a sí misma hasta que su 
espalda está presionada contra mi pecho. Mantengo mis brazos alrededor y la abrazo mientras lee la carta.

Lali

No tengo ni idea de qué esperar de las palabras que acaba de escribir, pero tan pronto como me entrega el papel empiezo a empaparme de cada frase tan rápido como mis ojos pueden escanearlas. El hecho de que exista una barrera en la manera de comunicarnos hace de cada palabra que recibo de él, en cualquier forma, algo que siento la necesidad de consumir lo antes posible.

No sé si en realidad soy más consciente de mi propio corazón de lo que otras personas son de los suyos, pero me inclino a creer que lo soy. El hecho de que no puedo escuchar el mundo a mí alrededor me deja centrarme más en el mundo dentro de mí. Gaston me dijo que la única vez que es consciente de sus propios latidos es cuando está silencioso y quieto. Ese no es el caso para mí, porque siempre es silencioso en mi mundo. Siempre estoy al tanto de mis latidos. Siempre. Conozco su patrón. Sé su ritmo. 

Conozco lo que lo hace acelerar y frenar, e incluso sé cuándo esperar eso. A veces siento que mi corazón reacciona antes de que mi cerebro tenga la oportunidad de hacerlo. Las reacciones de mi corazón siempre han sido algo que era capaz de predecir... hasta hace unos meses.

La primera noche que saliste a tu balcón fue la primera noche que noté el cambio. Fue sutil, pero estaba allí. Sólo un pequeño salto extra. Lo sacudí porque no quería pensar que tuviera nada que ver contigo. Me gustaba cuan leal mi corazón era a Martina, y no quería que mi lealtad hacia ella cambiara.

Pero entonces, la primera vez que te vi cantando junto a una de mis canciones, pasó otra vez. Sólo que esa vez fue más evidente. Se aceleraba un poco más cada vez que veía tus labios moverse. Empezaba a golpear en lugares en los que nunca sentí latir mi corazón antes. La primera noche que te vi cantando, tuve que levantarme e ir dentro para terminar de tocar, porque no me gustaba como hacías sentir a mi corazón. Por primera vez, creí que no tenía absolutamente ningún control sobre él, y eso me hizo sentir horrible.

La primera vez que salí de mi habitación para encontrarte de pie en mi apartamento, empapada por la lluvia… Dios mío, no sabía que los corazones pudieran latir de esa manera. Conocía mi corazón como la palma de mi mano, y nada lo había hecho nunca reaccionar como lo hiciste. Puse las mantas en el sofá para ti lo más rápido que pude, te indiqué la dirección del cuarto de baño, y de inmediato fui a mi dormitorio. Te ahorraré los detalles de lo que tuve que hacer mientras estaba en la ducha, para calmarme después de verte de cerca por primera vez.

 Mi reacción física a ti no me preocupaba. Las reacciones físicas son normales, y en ese momento, mi corazón todavía le pertenecía a Martina. Mis latidos eran todos por Martina. Siempre lo habían sido, pero cuanto más tiempo pasaba contigo, más empezabas a infiltrarte sin intención y a robar algunos de esos latidos. Hice todo lo que pude para evitar que suceda. Durante un tiempo, me convencí de que era más fuerte que mi corazón, y por eso permití que te quedes.

Pensé que lo que sentía por ti no era más que atracción y que si me permitía tenerte en mis fantasías lo suficiente, eso bastaría en la realidad. Sin embargo, pronto me di cuenta de que la manera en que fantaseaba contigo no era en absoluto como los chicos normalmente fantasean sobre las chicas por las que están atraídos. No me imaginaba a mí mismo robándote besos cuando no había nadie alrededor. No me imaginaba deslizándome en tu cama en medio de la noche y haciéndote todas las cosas que ambos deseábamos que hiciera. En cambio, imaginaba lo que se sentiría si te quedases dormida en mis brazos. Me imaginaba lo que sentiría al despertar a tu lado en la mañana. Me imaginaba tus sonrisas y tu risa e incluso lo bien que se sentiría ser capaz de consolarte cuando lloraras.

El problema en que me había metido se hizo evidente la noche que puse esos auriculares en tus oídos y te observé cantar la canción que creamos juntos.

Mirando esas palabras pasar por tus labios, sabiendo que no podía oírlas y sintiendo cuánto me dolía el corazón por nosotros en ese momento, supe que lo que sucedía era mucho más de lo que podía controlar. Mi fuerza fue dominada por mi debilidad por ti. Los segundos en que mis labios tocaron los tuyos, mi corazón se dividió por completo en dos. La mitad te perteneció desde ese momento en adelante. Cada latido de mi otro corazón era para ti.

Sabía que debería haberte pedido que te vayas esa noche, pero no me atreví a hacerlo. La idea de decirte adiós dolía demasiado. Había planeado pedirte que te mudes al día siguiente, pero una vez que hablamos de todo, la facilidad con la que tratamos con nuestra situación, me dio más excusas para ignorarlo.

Saber que los dos luchábamos me dio esperanzas de que podía devolverle a Martina la parte de mi corazón que había perdido por ti.

El fin de semana de la fiesta de Nico fue cuando me di cuenta de que era demasiado tarde. Pasé toda la noche de la fiesta tratando de no mirarte.

Tratando de no ser obvio. Tratando de mantener mi atención enfocada en Martina, donde debería haber estado. Sin embargo, todo el esfuerzo y la negación del mundo no me habrían salvado de lo que sucedió al día siguiente.

Cuando entré en tu habitación y me senté a tu lado en la cama, lo sentí.
Sentí que me dabas un pedazo de tu corazón.

Y Lali, yo lo quería. Quería tu corazón más de lo que nunca he querido nada. Al momento en que me estiré y sostuve tu mano en la mía, sucedió. Mi corazón hizo su elección, y te eligió a ti.

 Mi relación con Martina era fabulosa, y nunca quise faltarle el respeto a lo que tenía con ella. Cuando te dije que la he amado desde el momento en que la conocí y que la amaría hasta el momento en que me muera, estaba siendo honesto. Siempre la he amado, la amo, y siempre la amaré. Es una persona increíble que merece mucho más de lo que la vida le ha dado, y me molesta hasta hoy cuando pienso en ello. Cambiaría mi suerte por la suya en un segundo si tuviera esa opción. Por desgracia, la vida no funciona de esa manera. El destino no funciona de esa manera. Así que incluso después de que supe que había encontrado en ti lo que nunca encontraría en mi relación con Martina, eso todavía no era suficiente. No importa lo mucho que me preocupaba por ti o cuan profundos eran mis sentimientos, nunca habría sido suficiente como para dejar a Martina. Si no podía cambiar su destino, iba al menos a darle la mejor maldita vida que pudiera tener. Incluso si eso significaba sacrificar los aspectos de la mía, lo habría hecho sin pausa, y nunca me hubiera arrepentido. Ni siquiera por un segundo.

Sin embargo, hasta hace tres semanas, no me di cuenta de que la mejor vida que podía darle era una vida sin mí. Necesitaba lo contrario de lo que podía ofrecerle, y sé eso ahora. Ella lo sabe ahora. Y lo aceptamos.

Así que cuando preguntas si volvería a elegirla sobre ti, estás presentando una situación de la que no puedo darte una respuesta directa. Porque sí, en este punto, probablemente me alejaría de ti si ella me lo pidiera. La mayor parte de mi lealtad todavía está con ella. Pero si estás preguntando ¿a quién necesito más? ¿Con quién quiero más estar? ¿A quién mi corazón anhela más? Mi corazón decidió eso por mí hace mucho tiempo, Lali.

Cuando he leído la última palabra, tiro del cuaderno contra mi pecho y lloro. Me desliza fuera de él hasta que estoy en mi espalda, y se cierne sobre mí, guiando mis ojos para encontrarse con los suyos.

Eres tú —dice en voz alta—. Mi corazón... te quiere.

Un sollozo se libera de mi pecho cuando escucho sus palabras.

Inmediatamente agarro sus hombros y me levanto mi misma, presionando mis labios en el área directamente sobre su corazón. Lo beso una y otra vez, en silencio dándole las gracias por haberme dado la seguridad de que no he estado sola en esto.

Cuando bajo mi cabeza sobre la almohada, se acuesta a mi lado, y me lleva contra él. Toca mi mejilla con su mano y lentamente se inclina para besarme. Su boca acaricia la mía tan cuidadosamente que se siente como si estuviera sosteniendo mi corazón en su mano, y tiene miedo de que se le pudiera caer.  

 Por mucho que estoy convencida de que haría todo lo posible para proteger mi corazón, todavía estoy demasiado asustada para entregarlo. No quiero dárselo hasta saber que es el único corazón que está sosteniendo.

No abro mis ojos, porque no quiero que sepa que lo oigo salir. Lo sentí besarme. Lo sentí deslizar el brazo de debajo de mí. Lo escuché tirar la camisa sobre su cabeza. Lo oí buscar un bolígrafo. Lo escuché escríbeme una carta, y colocarla en la almohada a mi lado.

Siento su mano mientras presiona en el colchón al lado de mi cabeza. Sus labios encuentran mi frente antes de alejarse y salir por la puerta de mi dormitorio. Cuando escucho la puerta principal cerrarse, ruedo sobre mi lado y tiro las mantas sobre mi cabeza para bloquear la luz del sol. Si no tuviera que trabajar hoy, me gustaría quedarme aquí en esta posición y llorar hasta secarme.

Rozo mi mano sobre el colchón en busca de su carta. Cuando la encuentro, tiro de ella bajo las sábanas conmigo y la leo.

Lali:

Hace unos meses, creíamos que teníamos todo planeado. Estaba con una chica con la que pensé que iba a estar para siempre, y tú con un tipo que creías que merecía mucho más de lo que hacía.

Míranos ahora.

Deseando más que nada ser libres para amarnos, pero maldecidos por la mala sincronización y corazones leales. Los dos sabemos dónde queremos estar, simplemente no sabemos cómo llegar hasta allí. O cuando deberíamos llegar.

Ojalá las cosas fueran tan fáciles como parecían cuando tenía diecinueve años.
Agarraríamos un calendario y elegiríamos una fecha, y empezaríamos una cuenta atrás hasta que pudiera aparecer en tu puerta y empezar a amarte.

Sin embargo, he aprendido que al corazón no se le puede decir cuándo, a quién, y cómo debería amar. El corazón hace lo que sea que quiere hacer. Lo único que podemos controlar es si le damos a nuestras vidas y mentes la oportunidad de ponerse al día con nuestros corazones.

Sé que eso es lo que quieres más que nada. Es hora de ponerse al día.

Por mucho que quiera quedarme aquí y dejar que esto comience entre nosotros, hay algo que quiero de ti, incluso más que eso. Quiero que estés conmigo al final, y sé que eso no puede suceder si sigo tratando apresurar nuestro principio. Sé exactamente por qué estabas renuente a dejarme entrar anoche: aún no estás lista. Tal vez no lo estoy, tampoco. Siempre has dicho que querías tiempo para ti misma, y lo último que quiero es empezar una relación contigo, cuando apenas he dado lo suficiente respecto a la que acaba de terminar con Martina.

No sé cuándo estarás lista para mí. Puede ser que sea el mes que viene, o el próximo año. Cuando sea, sólo sé que no tengo absolutamente ninguna duda de que podemos hacer que esto funcione. Sé que podemos. Si hay dos personas en este mundo capaces de encontrar una manera de amarse, somos nosotros.

Peter.

PD: Pasé la mayor parte de la noche viéndote dormir, así que esa es una fantasía que tengo que tachar en la lista. También escribí letras para una canción completa, lo que fue lamentable para Gaston. No tenía mi guitarra, así que lo obligue a hacer un primer corte de ella a las cinco de la mañana para que pudiera dejarla contigo.

Uno de estos días, la tocaré para ti, junto con todas las otras canciones que planeo escribirte mientras estamos separados. Hasta entonces, estaré esperando pacientemente.

Sólo di cuándo.

Doblo la carta y la acerco a mi pecho. Por mucho que me duele saber que está alejándose, también sé que tengo que dejarlo. Le pedí esto. Necesitamos esto. Necesito esto. Tengo que ponerme hasta un punto en el que sé que por fin podemos estar juntos sin toda la duda corriendo por mi cabeza. Él tiene razón. Mi mente tiene que ponerse al día con mi corazón.

Corro el dorso de la mano a través de mis ojos, y luego abro mis mensajes de texto.

Yo: ¿Puedes venir? Necesito tu ayuda.

Nico: Si esto tiene que ver con el hecho de que le di a Peter tu dirección anoche, lo siento. Me obligó.

Yo: Esto no tiene nada que ver con eso. Tengo que pedirte un favor enorme.

Nico: Estaré allí cuando salga de trabajar esta noche. ¿Debo llevar condones?

Yo: Eres un tipo divertido.  

 Cierro el mensaje a Nico y abro la canción que Peter me acaba de enviar. Meto la mano en el cajón por mis auriculares, y luego caigo de nuevo contra la almohada y golpeó reproducir.

IT 'S YOU
(Eres tú)

Baby, everything you’ve ever done
(Nena, todo lo que has hecho)

Underneath this here sun
(Debajo de este sol)

It doesn’t even matter anymore
(Ya ni siquiera importa)

Oh, of this I’m sure
(Oh, de esto estoy seguro)

Cuz you’ve taken me
(Porque tú me has dado)

Places I want to be
(Lugares en los que quiero estar)

And you show me
(Y me muestras)

Everything that I could ever
(Todo lo que jamás podría)

Want to see
(Querer ver)

You, you know it’s
(Tú, tú sabes que es)

You know it’s you
(Sabes que eres tú)

I think about you every single day  


(Pienso en ti todos los días)

Trying to think of something better to say
(Tratando de pensar en algo mejor que decir)

Maybe hi, how are you
(Quizás hola, como estás)

Not just anything will do
(No sólo hacer cualquier cosa)

Cuz you’ve taken me
(Porque tú me has dado)

Places I want to be
(Lugares en los que quiero estar)

And you show me
(Y me muestras)

Everything that I could ever
(Todo lo que jamás podría)

Want to see
(Querer ver)

You, you know it’s
(Tú, tú sabes que es)

You know it’s you
(Sabes que eres tú) 

8 comentarios:

  1. otrooooo
    @x_ferreyra7

    ResponderEliminar
  2. otrooooo
    @x_ferreyra7

    ResponderEliminar
  3. Maaasss por favor! amo tu nove!

    ResponderEliminar
  4. Ahh dios bye me llore todo en este cap ( si soy una sentimental de primera pero es que ayy nskskskkskaka)
    Que decir estoy taaan confundida como ellos!
    Tantas cosas para 1cap!!!
    Okok a ver entiendo a Lali y si es que tener esa duda de si después recurrirá a Martina es fea!!
    También la carta de Peter dios!! Fue tan bsnsns tierna, sincera y rara jaja
    Y si trato de decirle todo lo que sentía y fue muy honesto la vdd!! Hasta que dejó que Lali supiera bien todo lo que sentía por qué siempre solo decía una parte y se callaba la otra!!!
    Ayy me pareció super tierno y nada egoísta lo que hizo de darle el tiempo que Lali necesita para estar bien y empezó una relación con el! Y si es que ambos necesitan tiempo para sanarse y empezar a disfrutar su amor sin remordimientos ni nada!!
    Okok Lali lo dejo irse porque aunque no sea lo mejor necesita estar sola y pe ser en todo lo que dijo Peter !!
    La canción fue tan linda!!
    P. D me di cuenta que que soy la única que me comento todo y comento mucho pero es que necesito decir todo jajajaja sorry!!
    Creo recordar que dijiste que era 25 cap? Osea que ya esta por terminar ?? Ay noooooo amo la nove lo quiero que acabe

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Xk te crees k muchas veces comento: lo mismo k Angie.
      Jjajajaja ,xk lo comentas todo ,y mi PC no me deja comentar, y tengo k reiniciar el ordenador.
      X eso te doy las gracias Angie.
      GRACIAS

      Eliminar
  5. Ahh lo olvidé jajajaja que e onda que necesita Lali de Nico??! #Intriga

    ResponderEliminar
  6. Otro cap d infato.
    Jajajajaja,nena (con cariño),no tengo vuestra edad ,y me vas a matar.
    la gran duda ,k quiere d Nico?.

    ResponderEliminar